Alejandro Tapia

Circuncisión láser

La circuncisión es un procedimiento quirúrgico que realiza un urólogo, el cual consiste en retirar el prepucio. El prepucio es la piel localizada en la parte final del pene y tiene como objetivo cubrir el glande o cabeza de pene. Existen diferentes formas de realizar el procedimiento. La técnica clásica o con bisturí y la técnica Láser.La técnica clásica se realiza habitualmente en quirófano y consiste en realizar un corte con bisturí alrededor del glande con el propósito de retirar el prepucio y posteriormente unir los dos extremos de piel con suturas o puntadas. Al ser un procedimiento invasivo puede generar inflamación o dolor postquirúrgico con un tiempo aproximado de recuperación de tres semanas.

La técnica Láser o circuncisión Láser es una técnica novedosa fino, sin riesgo de sangrado con lo que la cicatriz es más estética y la recuperación es infinitamente más rápida, disminuirá el riesgo de contagio de enfermedades propias del pene.

Al ser un procedimiento ambulatorio de mínima invasión no se requiere mucha preparación previa, por precaución se solicitará al paciente un perfil preparatorio básico. El día del procedimiento se sugiere llegar acompañado con ropa cómoda y con mucha tranquilidad, es un procedimiento relativamente sencillo con muy bajos riesgos de complicaciones.


Posterior al procedimiento se sugiere reposo relativo 1-3 días, en algunos casos pueden regresar al trabajo al siguiente dia si este no implica un esfuerzo vigoroso. Se recomienda de 3-4 semanas antes de reiniciar vida sexual.

Infertilidad masculina

Aproximadamente 1 de 7 parejas tienen problemas de infertilidad. Y de esa proporción alrededor del 50% es a causa de infertilidad masculina.

La infertilidad masculina puede producirse debido a una baja producción de esperma, pero también a anomalías en la función del esperma o a obstrucciones que impiden su salida. Las enfermedades, las lesiones, los problemas de salud crónicos, las elecciones de estilo de vida y otros factores pueden contribuir a la infertilidad masculina. Si por más de un año, has intentado embarazar a tu pareja sin resultados, es momento de acudir a valoración para conocer las posibles causas y tomar un tratamiento apropiado. 

Varicocele

Esta afección se trata de la dilatación de las venas dentro del escroto. Estas venas transportan sangre sin oxígeno desde los testículos. Un varicocele se produce cuando la sangre se acumula en las venas en lugar de circular de manera eficaz hacia el exterior del escroto. 

Algunos de los problemas asociados a este padecimiento son: molestias en los testículos, dolor, baja producción de esperma e infertilidad. 

ETS

Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) o infecciones de trasmisión sexual (ITS), generalmente se adquieren por contacto sexual; aunque puede haber casos de contagio como de madres a hijos durante el embarazo o trabajo de parto o por una transfusión de sangre. Las bacterias, los virus o los parásitos que causan las enfermedades de transmisión sexual pueden ser transmitidas de una persona a otra a través de la sangre, el semen o los fluidos vaginales y otros fluidos corporales.

Muchas veces los síntomas se pueden tratar con un diagnóstico y tratamiento adecuado. 

Verrugas genitales

Las verrugas genitales son una infección de transmisión sexual. La mayoría de las personas sexualmente activas se infectan con al menos un tipo de virus del papiloma humano (VPH). Las verrugas genitales afectan los tejidos húmedos del área genital. Pueden parecer pequeñas protuberancias de color carne. En algunos casos son imperceptibles a la vista por su pequeño tamaño. Examinarse con regularidad ayuda a detectar oportunamente y aplicar un tratamiento adecuado. 

Epididimitis

La epididimitis es una inflamación de la estructura tubular que se encuentra en la parte posterior del testículo, llamado epidídimo. Esta se encarga de almacenar y transportar el esperma; este padecimiento puede afectar a varones de cualquier edad y las causas son varias, desde infecciones bacterianas hasta transmisión sexual. A veces, también se puede inflamar un testículo, lo que da lugar a un trastorno denominado “orquiepididimitis”.

Prostatitis

La prostatitis es una afección de la glándula prostática que por lo general se asocia con inflamación. La prostatitis con frecuencia provoca dolor o dificultad al orinar, además de dolor en la zona pélvica o los genitales. Las infecciones bacterianas son la causa de algunos casos de prostatitis aunque se sabe que hay 4 tipos:  prostatitis bacteriana aguda; prostatitis bacteriana crónica; prostatitis crónica o síndrome de dolor pélvico crónico; prostatitis inflamatoria asintomática. 

Litiasis

También conocidos como cálculos renales, pueden deberse a muchas causas: una dieta deficiente, el exceso de peso corporal, algunas afecciones médicas; algunos suplementos y medicamentos, se encuentran entre las muchas causas de los cálculos renales. Los cálculos renales pueden afectar cualquier parte de las vías urinarias, desde los riñones hasta la vejiga.

Fimosis y parafimosis

La fimosis es una afección en la cual el prepucio de un pene que no ha sido circuncidado no se retrae de la cabeza del pene; esto puede ocasionar dolor al orinar o durante una erección. La parafimosis es una condición en la que el prepucio no regresa a su posición normal después de ser retraído, lo cual puede ocasionar hinchazón dolorosa del pene y deterioro del flujo sanguíneo.

Dolor testicular

Un dolor en los testículos puede ser a causa de varios motivos. Los testículos son glándulas muy sensibles. El dolor puede provenir del mismo testículo o del tubo en espiral y el tejido de sostén que están detrás del testículo (epidídimo).

Es importante que un médico valore para conocer la causa, entre ellas existen varias, incluyendo: neuropatía diabética, hidrocele, hernia inguinal, cálculos renales, orquitis (inflamación de los testículos). De ahí la importancia de asistir a consulta médica si presentas dolor en uno o ambos testículos.

Hiperplasia prostática

La hiperplasia prostática benigna, también es conocida como «agrandamiento de la glándula prostática», se trata de una afección frecuente que surge con la edad. El agrandamiento de la glándula prostática puede provocar síntomas urinarios molestos, como el bloqueo del flujo de orina de la vejiga. También puede provocar problemas de vejiga, vías urinarias o riñón. Hay diferentes tratamientos, visítanos y te haremos saber cuál es el mejor para ti. 

Incontinencia Urinaria

La incontinencia urinaria es provocada por la pérdida del control de la vejiga, y es un problema bastante frecuente y que a menudo causa vergüenza. Puede ir desde una ligera pérdida de  orina ocasional, hasta tener una necesidad de orinar tan repentina y fuerte que se escapa antes de llegar al baño. 

Si te identificas con alguna de estas situaciones, visítanos para valorarte y ofrecerte un tratamiento adecuado. 

Infecciones urinarias

Este tipo de infecciones puede producirse en cualquier parte del sistema urinario: los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra. La mayoría de las infecciones ocurren en las vías urinarias inferiores (la vejiga y la uretra).

Las mujeres tienen un mayor riesgo de contraer una infección de las vías urinarias que los hombres. La infección que se limita a la vejiga puede ser dolorosa y molesta. Sin embargo, puedes tener consecuencias graves si la infección se extiende a los riñones.

Si presentas dolor en la micción, sensación o ganas constantes de orinar y poco flujo de orina, acude a revisión y evita una complicación. 

Cáncer de próstata

El cáncer de próstata es un cáncer de los más comunes. La mayoría de los cánceres de próstata crecen lentamente y permanecen localizados en la glándula prostática, en donde pueden no causar daño grave. Pero, si bien algunos tipos de cáncer de próstata crecen lentamente y pueden necesitar un tratamiento mínimo o no necesitar ningún tratamiento, otros tipos son agresivos y se pueden diseminar con rapidez.

Agenda tu cita de valoración si presentas uno o varios de los siguientes síntomas: problemas para orinar, disminución en la fuerza del flujo de la orina, sangre en la orina, sangre en el semen, dolor de huesos, entre otros.